#Reseñoviembre es una iniciativa que imita al reto de los artistas del #Inktober, pero desde el reseñismo y la divulgación, ofreciendo 30 reseñas en los 30 días del mes de noviembre, a menudo partiendo de unas palabras-estímulo comunes a todos los participantes.
Estímulo: CUIDADOS
Obra: Dementia 21, de Shintaro Kago
Motivo: Las aventuras surrealistas de una cuidadora de ancianos en un futuro ¿cercano?
Si hay algo que nos une como especie es que, si la salud y la suerte lo permiten, todas las personas envejecemos, lo cual conlleva una mayor necesidad de cuidados. Pacientes exigentes que se reproducen por mitosis, memorias defectuosas que causan desintegraciones, dentaduras que se multiplican infinitamente, kaijus jubilados, bucles metanarrativos, arrugas infecciosas, arquitectura ludópata y vórtices en los pliegues de la piel. Esto es el día a día en las residencias de ancianos, como cualquiera que haya trabajado en una os podrá confirmar (y si lo niegan, mienten), y ciertamente es el trabajo al que se enfrenta a diario la protagonista de otra de las locuras del mangaka Shintaro Kago. Así que engrasad las ruedas de vuestra silla, reforzad las pelotas de tenis de vuestro taca-taca, apretaos el pañal y vamos a la aventura de la senectud.
Dementia 21, serializada entre 2011 y 2014, es un conjunto de historias autoconclusivas protagonizadas por Yukie Sakai, la cuidadora más cariñosa y profesional de su centro de apoyo y cuidados a domicilio para gente mayor. En cada una de las historias se enfrenta a un problema distinto relacionado con sus clientes o con la propia empresa, muy adaptada al siglo XXI en el peor de los sentidos. Y es que la mala baba de Kago no recae tanto sobre los ancianos, sino sobre el sistema en general y sobre la explotación laboral en particular. Constante competitividad (llevada al extremo en una Chaqueta Metálica/Battle Royale de cuidadoras), botones de valoración del servicio humano recibido, denuncia de la tendencia de la sociedad a apartar a los miembros no productivos de la misma, llegando incluso a presentar una serie de torres de hacinación de abuelos casi como en ataúdes.
Pero que este trasfondo serio no nos engañe: la obra de Kago ha sido siempre una salvaje y explícita sátira llena del humor más negro y los conceptos más absurdos llevados al extremo, como un Junji Ito sin freno. Ya lo vimos en La formidable invasión mongola, y aquí hace lo propio, acercándose algo más al escenario costumbrista de Reproducción por mitosis o Novia ante la estación. El guiño a Ito en este caso llega en una versión decrépita de su Uzumaki, cambiando la invasión de espirales por una de arrugas contagiosas que se extienden por cuerpos, paredes, carreteras… Un mero ejemplo de que todos los elementos que va a retorcer de forma surrealista en estas páginas giran en torno a la tercera edad, saltando constantemente entre géneros, de la comedia al terror, de la ciencia-ficción especulativa a los kaijus y superhéroes, pero siempre dejando un pequeño espacio a la metanarrativa.
Después de las obras menores que ECC Ediciones ha estado trayendo últimamente, es un placer descubrir que Kago aún tiene algo que contar, de la mano ahora de Ponent Mon. El formato de historia larga, aunque dividida en capítulos autoconclusivos, le da más empaque a su narrativa, además de permitirle jugar con la autorreferencialidad de forma inesperada, como ocurriera en las dos entregas de su Cuaderno de masacres. No hay un argumento de fondo, pero los relatos cohabitan y la protagonista evoluciona ligeramente. Y su dibujo ha ido mejorando sustancialmente con el tiempo, aumentando el nivel de detalle y dejando ilustraciones muy sugerentes y originales al comienzo de cada episodio. Dementia 21 es la mejor combinación de solidez e imaginación del Shintaro Kago de los últimos años. Absurdo controlado, exceso con estética, incontinencia con pañales.
Demencia 21, Vol. 1,
de Shintaro Kago
Ponent Mon
Contenido:
Dementia 21, Vol. 1 (Fantagraphics, 2018)
Rústica. 296 páginas. 22€.
Desde el 21/09/2020.
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