«You’ve been cooling / And baby I’ve been drooling,
All the good times, baby / I’ve been misusing,
A-way, way down inside / I’m gonna give ya my love…»
—Led Zeppelin, «Whole Lotta Love» (Led Zeppelin II, 1969)
Ah, febrero… El mes del amor. Medio intencionada, medio accidentalmente, los cómics que he leído y microrreseñado en estos últimos 29 días (¡poder bisiesto!) han tenido diferentes relaciones con este sentimiento: el amor a uno mismo disfrazado de un turbio y asqueroso «amor» carnal hacia otras personas; el amor entre compañeros de trabajo; el amor a (la idea de) Dios; el amor interesado frente al amor cautivo; o el amor por encima de inclemencias meteorológicas y sociales.
Pero antes de hablar de esto, este mes participé en el III Encuentro Interdisciplinar de Estudios en Medios de Masas en la Universidad de La Rioja, a la que agradezco que aceptara mi comunicación sobre el revisionismo político-social del cómic mainstream norteamericano a través de las obras del guionista Mark Russell. Podéis verla (y malescucharla, mientras hablo/leo a toda velocidad) aquí, si bien pronto la convertiré en un artículo que podréis leer en Globos de Pensamiento. Ahora os dejo con las microrreseñas de este mes y, por petición popular, a partir de marzo crecerá esta sección Englobando el mes para incluir elementos que ya incluía originalmente, como son recomendaciones escritas y audiovisuales que hayan llamado mi atención. Sin más que añadir, leamos acerca de…
BEZIMENA
Retrato de UN agresor sexual
La contraportada y todo el aparato publicitario en torno a la última obra de Nina Bunjevac prometía una radiografía psicológica del agresor sexual en forma de cuento mitológico. Lo que finalmente nos encontramos es bastante más reduccionista, centrándose en un único tipo de agresor, el que tiene algún tipo de trastorno mental que le impide separar realidad de ficción llevándole a crímenes más graves. De esa propuesta más sesuda y generalizada queda apenas ese autoengaño del agresor para convencerse de que sus víctimas en realidad sí están disfrutando de su abuso sexual, algo que la autora vivió en sus carnes en su juventud. Pero, expectativas generadas aparte, ¿es Bezimena un buen cómic?
La respuesta debe, por fuerza, ser doble, ya que no, esto no es exactamente un cómic, sino un libro de ilustraciones a toda página, yuxtapuestas a páginas negras con diálogos en un fondo de estrellas. Una propuesta formal que trata de transmitir la sensación de «voyeurismo» que acompaña al protagonista de la historia. En ese sentido, cumple en lo artístico con un dibujo realista muy detallado y perturbador, intercalado con puntuales pasajes oníricos que nos remiten a diversas formas del mito al que se refiere el título, marco para el relato más contemporáneo. En última instancia, es esta valentía gráfica y su potente sordidez lo único reseñable de la obra, quedando su argumento en una mera anécdota desgarradora en la que pesa más la provocación que el mensaje.
Bezimena,
de Nina Bunjevac
Reservoir Books
Contenido:
Bezimena (Fantagraphics, 2019)
Cartoné. 200 páginas. 24.90€.
Desde el 05/09/2019.
FAKE
Cuerpazo de policía
En la era de internet y la pornificación masiva, se agradece descubrir que en un género como el yaoi, tan denostado por ignorancia (la mía propia, hasta llegar a este primer contacto con el género), hay obras como Fake. Sin abandonar los tópicos del «boy’s love», la obra de Sanami Matō se esfuerza por crear una historia atractiva que mantiene el interés mediante un procedimental policíaco adscrito también a las buddy movies y las parejas de opuestos. Y es que Fake es tanto un thriller con elementos dramáticos como una comedia romántica, donde los elementos adultos no solo vienen (apenas) por el sexo o el erotismo de una relación homosexual incipiente, sino también por la violencia, en ocasiones muy cruenta, de los casos policiales.
Asesinos en serie, encontronazos con la mafia, tráfico de drogas y hasta un misterio con fantasma tienen cabida en la obra de Matō, manteniendo casi en todo momento el interés, y con un plantel de secundarios muy cuidado que también añade desahogos cómicos. Un dignísimo entretenimiento a recuperar.
Fake, Vols. 1-7,
de Sanami Matō
Norma Editorial
Contenido:
Feiku (Biblos, 1994-2000)
Rústica. 160-208 páginas. 8€.
Entre el 09/06/2005 y el 28/07/2006.
GOD IS DISAPPOINTED IN YOU
Gracias a Dios
Resumen humorístico pero preciso de la Biblia, en God is Disappointed in You el guionista Mark Russell hizo una declaración de intenciones involuntaria (o no) respecto a lo que iban a ser sus obras posteriores: tomar textos y formas clásicas para (re)presentarlas bajo un prisma político-social actual. Acompañándose de las ilustraciones del dibujante «newyorkerista» Shannon Wheeler, el Antiguo Testamento de Russell subraya algunos de los aspectos más absurdos del original, mientras que en el Nuevo es el mensaje de Jesucristo el que queda prácticamente intacto, más resumido y cercano, limado de todo lo conflictivo, y es la sociedad de la época y sus adversarios quienes resultan ridículos y excesivos. En cualquier caso, como afirmó en una entrevista en la web Zona Negativa, su postura respecto a las creencias es de respeto, solo rechazando su imposición: «No tengo ningún problema con la religión como forma de automedicación, pero desprecio el fundamentalismo, que es la creencia en que todo el mundo necesita tomar la misma medicación que tú». Una postura, como mínimo, respetable, alejada de las acusaciones de blasfemia que recibiría en 2019 con el anuncio de su cómic Second Coming.
Una falta de sentido del humor de proporciones bíblicas, al contrario que las obras de Russell. Así, God is Disappointed in You tuvo una continuación en 2016 con Apocrypha Now, de nuevo junto a Wheeler y repitiendo la fórmula con los Midrash, los Evangelios Apócrifos y los Gnósticos o, como dice en la contraportada, con “los extras del DVD de las Sagradas Escrituras”. Ambos volúmenes cumplen, en definitiva, una función tanto didáctica (o ilustrativa) como humorística, demostrando clara atención a los materiales originales y poniendo de manifiesto lo positivo y lo negativo, lo relevante y lo absurdo, y lo preservado y lo tergiversado de estos textos religiosos.
God is Disappointed in You / Apocrypha Now,
de Mark Russell y Shannon Wheeler
Top Shelf Productions
Contenido:
God is Disappointed in You (Top Shelf Productions, 2011)
Apocrypha Now (Top Shelf Productions, 2016)
Cartoné en falso cuero. 224 y 196 páginas. $39.99.
Desde el 05/05/2016.
PAÍS DE NIEVE
Letras frías
La adaptación de novelas a un medio secuencial está siempre repleta de decisiones complejas relacionadas con qué decir, qué mostrar y, sobre todo, qué obviar para aligerar el relato visual. Por otra parte, si el prestigio de la novela adaptada no viene tanto por lo que cuenta sino por cómo lo cuenta, esto es, por una prosa sugestiva y poderosa, la dificultad para adaptarla se multiplica. Y si a esto le sumamos que la historia representada es una en la que aparentemente tampoco ha pasado tanto tiempo hasta nuestro presente, pero el discurso, los valores y las convenciones sociales han avanzado considerablemente, el choque al leer una adaptación como la que hace Sakuko Utsugi del aclamado País de nieve de Yasunari Kawabata es considerable.
La historia gira en torno a la relación entre un joven rico y egoísta y una mujer que se ve obligada, de un modo u otro, a ejercer de geisha en un pequeño pueblo de montaña. Por supuesto, él está casado y retorna al pueblo a conveniencia, desarrollando una relación tormentosa, a ratos incluso forzada, con esta mujer inexplicablemente enamorada pese a los desengaños. La prosa de Kawabata, a ratos poética y preciosista, y a ratos excesiva y hasta involuntariamente cómica (al margen de la traducción de Bárbara Pesquer), se ve también diluida por las decisiones narrativas de Utsugi, cuyos cortes abruptos entre escenas y carencias expresivas para diferenciar a algunos personajes, resultan en una lectura fría y desapegada que, como la nieve, se acaba diluyendo y olvidando al poco de terminarla.
País de nieve,
de Sakuko Utsugi (sobre Yasunari Kawabata)
Quaterni
Contenido:
Yukiguni (Home-sha, 2010)
Rústica. 224 páginas. 14.50€.
Desde el 13/01/2016.
UN OCÉANO DE AMOR
Sardinas en aceite
El pez grande se come al chico. Esta expresión es una realidad con la que convivimos, más o menos metafóricamente, en nuestro día a día. Y es algo que vivirá en sus carnes uno de los protagonistas de esta historia muda que, con un apartado artístico mayormente caricaturesco, nos arrastra mar adentro a merced de las inclemencias del océano… y de quienes campan por él. Así, debido a un accidente fortuito relacionado con un buque pesquero de arrastre (de esos que acaban con el fondo marino), un señor menudo correrá una serie de aventuras involuntarias en su intento de regresar a casa. Allí estaba esperándole su esposa amantísima, hasta que decidió salir en su busca siguiendo los consejos de una pitonisa.
Lo que Lupano y Panaccione nos cuentan en Un océano de amor (o A Sea of Love, en la edición americana de Lion Forge que manejo) es, efectivamente, una comedia dramática con tendencia al absurdo en el que una pareja cercana a la tercera edad parece jugar al ratón y al gato mientras buscan reencontrarse. Por el camino, críticas sutiles (o no) a la explotación del mar, al vertido indiscriminado de residuos, a las diferencias de clase, a la corrupción de la ley o a las efímeras tendencias de las redes sociales. Pero en el fondo esta historia da lo que promete: una historia de amor. Una peculiar, discutible, pero igualmente entrañable historia de amor.
Un océano de amor,
de Wilfrid Lupano y Gregory Panaccione
Reservoir Books
Contenido:
Un ocean d’amour (Delcourt, 2014)
Cartoné. 240 páginas. 24.90€.
Desde el 03/09/2015.
Y hasta aquí el repaso mensual a mis lecturas destacadas, con recomendaciones abiertas o cautelosas. Solo queda recordar las reseñas y artículos de este mes:
DEVASTACIÓN, de Julia Gfrörer (Alpha Cómic, 2020) [Reseña]
Esto es todo, aunque reincidimos: se aceptan sugerencias para ampliar este Englobando el mes con más contenido de vuestro interés. ¡Hasta el mes que viene!
Si te gusta lo que hago, puedes invitarme a un café:
Deja una respuesta